José Luis Alarcón Vela

Hablar de Mercedes-Benz Clase G es hablar de un vehículo al cual no le importa ofrecer el máximo lujo con estupendos terminados y calidad de materiales  para recorrer los caminos o muchas veces crearlos al andar sobre laderas, llanos y pedregales donde simplemente otros no pueden accesar.

Al Clase G incluso el tiempo parece no afectarle, sus líneas duras, rectas y cuadradas siguen siendo casi las mismas desde hace más de tres décadas, aunque ahora gracias a la evolución de la tecnología cuenta con mayor confort, lujo, amplitud y un manejo más fácil.

Observar un Clase G de líneas nítidas y duras con detalles como las bisagras de las puertas por fuera y su diseño imponente le dan ese carácter inconfundible que se ha conservado durante 35 años y que ha demostrado  ser eficiente en todo tipo de terreno.

El nivel de calidad extraordinariamente alto en el proceso de producción y el carácter artesanal con el que se fabrica a mano el bastidor, cuenta con chapas de acero de 4 mm de espesor y más de 6,400 puntos de soldadura son garantía de durabilidad y máxima precisión. 

Después de “escalar” hacia el interior y sentarse tras el volante la perspectiva de visión es de lo mejor, todo queda bajo nuestra vista. Botones y mandos quedan a una corta distancia así como el parabrisas que tiene solo unos centímetros de separación con respecto al tablero que no adolece de lujo o buenos terminados complementados con elegantes detalles como la iluminación ambiental.

 La habitabilidad y el confort de los asientos son 2 atributos muy apreciados de la Clase G. El espacioso todoterreno brinda a sus ocupantes el mayor confort para viajes largos y al circular por terrenos movidos, aunque definitivamente su origen militar no se olvida sobre todo si se va en las plazas traseras donde el ángulo en los respaldos a la larga resulta incómodo, pero se gana un enorme espacio de carga en la cajuela.

Bajo el cofre de un Clase G en México  se puede encontrar ya sea un motor V8 o V12. El primero se utiliza en la versión  G 500 de 5.5 litros y la G 63 AMG que es también V8 pero Biturbo, mientras que el propulsor V12 es para la opción G 65.

La potencia en el G 500 L es de 387 hp con 530 Nm, el Clase G 63 AMG la potencia llega a los 544 hp con 760 Nm y para el G 65 se tienen disponibles 612 hp con 1000 Nm de torque. Todas estas opciones cuentan con trasmisión automática de 7 velocidades y sistema Start & Stop.

El equipamiento es completo con sistema de audio con conexión Bluetooth para el teléfono, conexiones USB, Auxiliar y para el iPod. GPS y cámara de reversa para facilitar las maniobras de estacionamiento.

El sonido de el motor sobre todo en la versión AMG no solo se escucha más potente, sino su aceleración es más rápida y el trazo en curvas se nota más firme gracias también a la suspensión que no olvida sus orígenes en la milicia, es dura pero sin llegar a molestar.

La Clase G conjuga como ninguno de sus competidores, atributos aparentemente irreconciliables. Por un lado es un vehículo robusto con aptitudes especiales para todo terreno y por el otro lado un automóvil exclusivo para el tiempo libre con un nivel elevado de confort en carretera.

Mercedes-Benz ha desarrollado este vehículo para conductores activos que esperan siempre más y que quieren estar preparados para cualquier situación inimaginable en su vida, tanto en la jungla urbana como en excursiones por terrenos aparentemente inaccesibles. 

Además de estas tres opciones, en nuestro país también es posible adquirir bajo pedido, el Clase G en su versión más impactante: Mercedes-Benz Clase G 63 AMG 6X6, un mounstruo que devora cualquier camino, gracias a sus tres ejes y seis ruedas movidas impulsadas por un motor de 8 cilindros y 544 hp con 760 Nm de torque.

Definitivamente un Clase G podrá no ser el vehículo mejor parecido, pero su rudeza y dimensiones se vuelven un imán de miradas ya sea en el campo o la ciudad.

Los precios de las 3 versiones disponibles en nuestro país del Clase G de Mercedes-Benz son:

1 millón 899 mil pesos para el G 500 L; 2 millones 600 mil pesos para el G 63 AMG, y 4 millones 200 mil pesos para el G 65. 

Si lo que se desea es un Clase G 63 AMG 6X6, se tendrán que invertir 8 millones de pesos.